Tantas ganas como miedo.
Un duelo a corazón abierto bajo el manantial que surge de mi cueva.
Refugio de tu nombre y desamparo del mío.
Busco redención, igual que tú.
Borrar el silencio, el frió, la impaciencia, la prudencia miserable.
Besos a la orilla del limbo mientras sangra la libertad del momento.
En el viejo reloj de cristal escapan la arena y el tiempo.
Licántropos ante la desnudez.
Cuerpos que saben de esperas y no de palabras o recuerdos.
Nace el destino a golpe de sed.
Muévete al unísono conmigo mientras el trueno enmudece los sueños.
Salvación húmeda y eterna.
Peregrinos de cuerpos y anonimato.
¿Quién posee a quien?
Deja que te duela.
Acabar la noche, desarraigar de la piel el todo.
Ya llega la aurora
En la cama solo huellas efímeras.
Las hojas han empezado a cubrir las calles.
Un duelo a corazón abierto bajo el manantial que surge de mi cueva.
Refugio de tu nombre y desamparo del mío.
Busco redención, igual que tú.
Borrar el silencio, el frió, la impaciencia, la prudencia miserable.
Besos a la orilla del limbo mientras sangra la libertad del momento.
En el viejo reloj de cristal escapan la arena y el tiempo.
Licántropos ante la desnudez.
Cuerpos que saben de esperas y no de palabras o recuerdos.
Nace el destino a golpe de sed.
Muévete al unísono conmigo mientras el trueno enmudece los sueños.
Salvación húmeda y eterna.
Peregrinos de cuerpos y anonimato.
¿Quién posee a quien?
Deja que te duela.
Acabar la noche, desarraigar de la piel el todo.
Ya llega la aurora
En la cama solo huellas efímeras.
Las hojas han empezado a cubrir las calles.
†IvonneCopyright ©
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