1.3.11

Dibujando deseos


Quiero, escribiendo, llegar hasta tus mayores adentros, necesito que me absorbas, que me inhales, que me hagas partícipe de tu respiración, de tus jadeos, de tus suspiros.

Quiero fundirme contigo , que sientas mi cuerpo desnudo.

Quiero envolverte, acariciarte, con el manto de mis mensajes, de mis textos.

Escribo para ti, porque sé que estás esperando esas letras para reencontrarte conmigo.

A partir de este renglón empiezo a respirar mas agitada, te siento , siento tus manos, tus dedos, nota como me acarician, como me rodean los labios, como dibujan su contorno.

Noto las yemas acariciando los poros de mi piel.Percibo el murmullo de tus sonidos de la garganta justo detrás de mi oreja, noto ese aire caliente que sale de tu boca y que enerva mi piel.

Quiero que sigas esa ruta de caricias por mi cuerpo. Redondea con el dedo índice mis senos, y, lamiendo con tu lengua la yema de tu dedo índice, moja esa aureola y el volcán de su centro, que, al contacto de esa humedad, se eleva victorioso, buscando, buscando…

Abre la palma de tu mano y baja por mi vientre, entreteniéndote dibujando círculos encima de mi ombligo, para, después, suavemente, introducirte entre mi piel y la fina seda de mi prenda más íntima.

Es entonces cuando aún respiro con más fuerza, con mayor rapidez, como se escapan leves sonidos guturales con el aire de mis pulmones.

Es entonces cuando las fuerzas me vencen, cuando el deseo me puede, cuando en mi cama termino de escribir este texto con mis caricias, con tus caricias.